En este café (declarado como Bar Notable de Buenos Aires), se sientan Bruno Bassán y Georgina Olmos (madre de Alejandra), después de muchos años sin verse. Fernando, que abandonó por completo a Georgina, es el conflictivo tema de conversación.
Situado en Avenida de Mayo 590, muy cerca de la actual Casa de la Cultura de la Ciudad (ex edificio de La Prensa, cuyos periodistas atestaban el lugar), está literariamente asociado a la figura de Julio Cortázar quien se sentaba y escribía allí. Una escultura del autor de Los Premios (novela que se refiere al café y que se dice compuesta en este lugar) puede verse tras una de las mesas, así como su fotografía y materiales alusivos en las paredes.
Inaugurado en 1954, en un edificio que perteneció a los almacenes Gath & Chaves, tuvo cambios de dueño y remodelaciones. María Salazar, arquitecta a cargo de la última, señala que se propuso respetar valiosos elementos originales, como el piso de mosaicos blancos y negros o la boiserie, especialmente restaurada. Bronces, espejos, mesitas de mármol, completan un ámbito cálido, elegante y hospitalario. Es uno de los bares más visitados por turistas, así como por clientes ocasionales.