El hermoso edificio en el que por muchos años funcionó la Sociedad Argentina de Locutores se transformó en un lugar de referencia obligada cuando se habla de Germán García. Continuando con el programa iniciado en la Biblioteca Internacional de Psicoanálisis, sus actividades están orientadas hacia la investigación, producción y enseñanza en el campo del psicoanálisis en la cultura. En sus palabras: “Yo tengo una idea que siempre digo cuando enseño. Si el psicoanálisis fuese matemática no habría por qué dedicarse a la cultura, pero como el psicoanálisis depende de su propia manera de insertarse, tiene que inventar para no soltarse. Como decía Lacan, ‘el psicoanálisis es una acción que se deshace’. Entonces, a mí me parece que no puede estar alegremente vuelto sobre sí mismo como si tuviese una consistencia interna que le permita prescindir de la manera en que circula. Para mí es una posición política, y también es una manera de concebir el psicoanálisis”.
En este sentido, dentro de estas paredes y extensivamente, en los bares lindantes, Germán García promovió el cruce de disciplinas y discursos con la idea de saber y conocer algo sobre el uso de las palabras que configuran la trama cultural.