En esta escuela media especializada en artes plásticas estudió María Elena Walsh, en el turno tarde previsto para las señoritas, desde los once hasta los diecisiete años, abandonándola apenas antes de obtener el título debido al viaje que hizo a los Estados Unidos invitada por Juan Ramón Jiménez. La escuela estaba situada en ese entonces en un palacete que se decía había sido de la familia Lanusse, ya demolido y reemplazado por el edificio que ocupa la Cancillería de la Embajada de Brasil. Había sido fundada en 1799 como Escuela de Geometría, Arquitectura, Perspectiva y Dibujo por Manuel Belgrano, y en 1937 recibió el nombre de Escuela Nacional de Bellas Artes Plásticas Preparatoria Primer Ciclo Manuel Belgrano. Según su propio balance, allí María Elena Walsh aprendió poco pero absorbió mucho, al estar inmersa en un medio donde lo estético era más importante que lo escolar. También se estrenó como poeta satírica en largas tiradas de versos donde se burlaba de los profesores, se interesó por la política antinómica de la época y conoció a Elba Fábregas, una compañera mucho mayor que ella que la ayudó a publicar sus primeros poemas.