Comenzó como un viejo playón de maniobras ferroviarias, luego, en la década del sesenta, fue un mercado de frutas, y hoy, el Saldías Polo Cultural es uno de los espacios fundamentales de la música popular Argentina.
En 2009, Spinetta se encontraba preparando su histórico show de más de cinco horas de duración, “Spinetta y las bandas eternas”. Este recital había cobrado tal magnitud, que superaba la capacidad de su estudio y las salas donde realizó los primeros ensayos. Necesitaba un espacio mucho más amplio y le pareció que el Saldías era el lugar ideal. Se armaron cuatro salas para los ensayos nombradas Almendra, Pescado Rabioso, Invisible y Spinetta, unas donde ensayaría con sus bandas y otra para su etapa solista. Los ensayos duraron más de tres meses y contaron con Charly García, Fito Páez, Gustavo Cerati, Ricardo Mollo, León Gieco, y prácticamente todos los músicos que alguna vez formaron parte de alguna de sus bandas.
Actualmente, el Saldías rinde culto a Spinetta a través de varios murales con imágenes del Flaco, con el nombre de las salas Almendra, Spinetta Jade y Pescado Rabioso, y con los pasillos La la la y Socios del desierto. Hoy, el espacio no sólo funciona como sala de ensayo, también es lugar de reunión de las bandas jóvenes más importantes, de festivales, conciertos y muestras de arte.